CAMBIA TU LOOK
Por: Laura Poliné
Asesora de imagen
y estilista de imagen
@laurapogo
Para muchas, la frase cambio de look causa cierta impresión pues de inmediato viene a la mente la idea de una serie de cambios radicales a nuestra imagen. Cambio de look pareciera ser sinónimo de una gran inversión de tiempo y dinero en nuestro aspecto físico, es relacionado con una revolución a todo lo que conocemos como nuestra imagen hasta el momento. Todo el tema puede convertirse en una pesadilla al momento de hacerlo siendo madre o en medio de un embarazo. En las siguientes líneas pretendo contarte que no se trata de una pesadilla, sino más bien que la maternidad es momento idóneo para llevar a cabo un cambio de look.
En mi experiencia como asesora de imagen he visto muy de cerca un sin número de mujeres que enfrentan el reto del embarazo con la mejor de las actitudes, de igual modo he visto muchas otras que optan por llevarlo de la manera más cómoda que les sea posible, y con el paso de los meses entran a la difícil tarea de ser madres olvidando por completo ser también mujeres. Sin lugar a dudas los trasnoches, las urgencias del bebé, la leche cada dos horas, el cambio del pañal, en muchas ocasiones te llevan a convertirte en la segunda prioridad en tu propia vida. Por esta razón una vez superada la etapa de la comodidad y funcionalidad extrema en tu día a día, un cambio de look puede representar la única vía para recuperar el cuidado de tu imagen personal. No se trata de hacer una gran inversión y renovar todo tu guardarropa, cambiar por completo tu aspecto físico, se trata de mejorar con ciertos detalles la manera en que luces, además siempre he pensado que con la maternidad se llega a cierta madurez que debemos representar con nuestra imagen.
Haz pequeños o grandes cambios en tu pelo, dedícale tiempo y cuidado. Puede ser que decidas recortarlo, sacar una pollina o cambiar de color, como también puedes dedicarte con esmero a aplicar tratamientos o aceites que lo nutran y devuelvan el brillo perdido. Es probable que no tengas siempre el tiempo para maquillarte, cuida tu piel y haz una pequeña rutina de maquillaje adaptada a tus facciones, enfócate en lo que deseas disimular y aquello que debes resaltar, elige 3 herramientas de trabajo, que hagan la rutina corta y fácil. Por ejemplo, en mi caso siempre maquillo debajo de los ojos, pestañas y cejas. Por último, pero no menos importante, observa tu guardarropa y desecha aquellas piezas que no has usado en años, no será de la noche a la mañana pero poco a poco reemplaza las piezas que ya no usas por piezas que sin dejar de ser cómodas tengan el poder de crear un look impactante. La maternidad representa una de las etapas más hermosas de la vida de una mujer, por esta razón es importante recibirla y también vivirla luciendo la mejor versión de ti.