Como padres y madres uno de los retos más difíciles es corregir a los niños. Con el pasar del tiempo, las experiencias y de nuestros mismos padres hemos aprendido diversas técnicas para alimentarlos, para enseñarles a dormir y hasta para caminar; sin embargo no nos enseñan a corregirlos. Algo que debemos tomar en cuenta es que siempre habrá diversas formas de hacerlo y que lo más importante es que cuando se le corrija no afecte su integridad física o sus sentimientos.

 

Aquí algunas consideraciones que debemos tomar en cuenta para corregirlos:

 

* Se reprende la acción que no fue adecuada o inaceptable, NO al niño.

 

* Indique las ventajas de cumplir las normas, ejemplo: «Si recoges tu habitación, tendrás más tiempo para jugar o ver la tv».

 

 

* Establezca opciones limitadas. Ej: ¿Qué deseas hacer primero bañarte o desayunar?» esta forma de hablar hace sentir al niño autónomo.

 

* Los adultos debemos dar ejemplo de serenidad y calma. Si sientes que estas muy enojado, aléjate hasta recuperar el control.

 

* Palabra y acción. Ej: “Es momento de recoger tus juguetes” entonces te dispones a ayudarlo, para que se sienta motivado y apoyado.

 

* Mírenlos a los ojos al momento de las correcciones.

 

* No retire su afecto o le diga que no lo quiere, son palabras muy hirientes y ellos lo ven como algo real y se sienten abandonados y sufren.

 

* Cambiemos la palabra “castigo” por “consecuencia”.

 

Les invito a todos y todas utilizar disciplina positiva basada en la comunicación, el amor, el entendimiento y la empatía. Recordado que los límites son importantes para promover un sano equilibrio.

 

 

“Los hijos aprenden poco de las palabras;

Sólo sirven tus actos y la coherencia de éstos

con las palabras”Joan Manuel Serrat

 

 

 

 

 

Ilene Arias Hamburgo

Psicóloga especialista en

Intervención en psicoterapia.

Directora de BabyCare RD