Judith Cueto, una Madre S.O.S. Emprendedora

Lee su historia de emprendimiento y contágiate de su fé. Tal vez eso es lo que necesitas tu para decidirte.

Dulce Ema fue un proyecto que nació junto a mi hija Ema. Por ella inicié a inventar y crear desde que supe que estaba embarazada de una niña. Busque tutoriales de flores en tela en YouTube, le hice preguntas a mi cuñada y a mi suegra que son muy buenas en manualidades y con la práctica fui elaborando las primeras bandas de pelo para mi esperada bebé.

Desde que la tuve en brazos supe que no quería despegarme nunca de ella, no me quería perder de nada y odiaba la idea de que por razones laborales tendría que conformarme con que me contarán cualquier novedad de mi chiquita. Así que antes de que terminara mi licencia de maternidad le pedí dirección a Dios y decidí darle forma al proyecto, busque nombre, logo y logística de cómo podría vender mis accesorios hechos a mano. Con ayuda de las redes sociales en menos de un mes ya había realizado mi primera venta.

Dulce Ema era mi plan B que en par de años sería mi A (eso creía yo) con la meta de poder dedicarle más tiempo a mi princesa. Pocos meses después de reintegrarme a mi trabajo me cancelaron. Siempre he puesto mi vida y decisiones en las manos de Dios, y tenía dos alternativas, tomar la oportunidad de desarrollar mi proyecto y poder estar con mi bebita tiempo completo o buscar otro empleo.

Dios me dió el valor de optar por la primera, yo sabía que Él me ayudaría y me sustentaría… DIOS NUNCA ME HA FALLADO y tenía la seguridad que en esta nueva aventura también estaría conmigo.

Se requiere mucho esfuerzo y disciplina para trabajar desde casa ya que un bebé es sumamente demandante más todos los quehaceres del hogar. Sin dejar de lado que nuestro cuerpo y mente también necesitan descanso. Pero todo es posible, así que entre cosa y cosa yo le dedico su tiempo al negocio.

La paciencia ha sido mi aliada, tengo muchas ideas que aún no desarrollo por la falta de tiempo pero siempre me recuerdo que esto es paso a paso. En estos casi dos años que tengo con la marca veo los logros que me llenan de orgullo y fracasos que lejos de desanimarme me ayudan a mejorar.

Hoy Dulce Ema ofrece mucho más que bandas de pelo, tenemos tutus y vestidos tutus, bodys y tshirts personalizados. Todos los artículos pueden elaborarse con los colores y motivos que el cliente desee. Además de que todo es hecho a mano con mucho amor y delicadeza.

Como madre emprendedora no dejo de animar a otras a perseguir sus sueños y dejar a un lado los miedos. Con valor y trabajo todo se logra. Nadie dijo que sería fácil pero tampoco imposible.